Conducir en un país extranjero es siempre un reto: ya sea por la distinta «tipografía viaria», por los indicadores en un idioma desconocido, o por imaginativas normas de circulación, es conveniente estar sobre aviso de los obstáculos con que podemos toparnos.

En Austria se circula por la derecha, y la gran mayoría de coches tienen cambio manual. El límite de velocidad en autopistas es 130km/h, 100km/h en carretera (siempre que no se indique algo distinto, en general 80km/h) y 50km/h dentro de poblaciones. Atención, cuando se entra en una población suele haber el cartel blanco con borde azul con el nombre, y encima una señal de fin de la limitación a 80km/h (o la que fuera que había hasta ese punto). Eso NO SIGNIFICA que se pueda circular a más de 80 a partir de ese punto: estamos dentro de una población, por lo tanto el límite es 50km/h.

Las autopistas (Autobahn) no tienen peajes, pero para circular por ellas hay que comprarse una pegatina (llamada Vignette) que debe colocarse visible en el parabrisas. Hay Vignettes para 10 días, 2 meses y un año, que cuestan unos 8, 25 y 80 euros, respectivamente. Se pueden obtener en cualquier gasolinera, y en puestos especiales en los pasos fronterizos de autopista. Las gasolineras se llaman Tankstelle, y las áreas de descanso Raststation o Raststätte.

Las autopistas se llaman Ax, las vías rápidas Sxx y las carreteras nacionales Bxxx. Los indicadores en carretera que nos llevan a una autopista, o los indicadores dentro de ella siempre tienen el fondo azul y letras blancas.