Los ferrocarriles no siempre son aburridos y con un diseño aburrido ya que en Innsbruck nos encontramos un ferrocarril muy moderno que combina una hermosa arquitectura con un un buen servicio para los viajeros. Es una de esas obras que son realmente muy vistosas y que llaman la atención de los que pasan por la zona ya que merece la pena poder disfrutarla.

Este ferrocarril cuenta en su totalidad con cuatro estaciones realmente bien situadas y que hace que los viajeros de este medio se encuentren muy cómodos. Es un ferrocarril que cruza incluso el río e incluso la última estación se encuentra a una altura de 288 metros.