En Austria es normal comer y beber en la calle. Durante el Adviento, con sus mercadillos, esta tendencia se acentúa de forma especial. Es curioso ver cómo los mercados de Navidad son puntos de reunión de amigos, familiares y conocidos que, desafiando las bajas temperaturas, disfrutan de una buena comida de pie en la calle. Porque es fácil confeccionar un menú bien completo simplemente yendo de caseta en caseta.

ENTRANTES

Sopas, de aquellas consistentes y calentitas, de patata o guisantes, con trocitos de bacon (Speck) y/o salchichas (Wurst). Muy recomendables cuando tenemos frío.
Ofenkartoffeln, patatas al horno partidas por la mitad y con relleno de crema agria y varias opciones: queso y bacon, hierbas aromáticas, maíz dulce, salsa tártara, etc.

PLATOS PRINCIPALES

Würstl (salchichas): Aunque la variedad de salchichas en Austria es inacabable, la Bosna parece ser la reina indiscutible de los mercados de Navidad. Se sirve en un panecillo largo tipo hot-dog, y lleva cebolla, mostaza y especias.
Bauernkrapfen, una especie de buñuelo gigante plano, con mermelada, o chucrut (Sauerkraut) por encima.

POSTRES

Bratäpfel, manzanas al horno con canela y caramelo, rellenas de pasas o nueces. Suelen ir acompañadas de salsa de vainilla.
Schokofrüchte, brochetas de fruta recubiertas de chocolate.

SOBREMESA CON GALLETAS

Zimtsterne, estrellas de Navidad con avellana o almendra y canela.
Vanillekipferl, pequeñas medias lunas con frutos secos y vainilla.
Lebkuchen, con jengibre, canela y clavo. Suelen tener formas divertidas para poder colgarlos del árbol de Navidad. Son a la vez galleta y adorno.
Spekulatius, crujientes, con caramelo y miel. Tienen dibujitos de escenas navideñas.

BEBIDAS

Glühwein (vino tinto, clavo, canela, azúcar, piel de naranja). Es vino caliente con especias. Una forma ciertamente eficaz de combatir las bajas temperaturas.
Punsch, algo parecido, pero con frutas. Muy dulce y con bastante alcohol. Siempre tenemos el recurso del Kinderpunsch, sin alcohol, para niños, abstemios y conductores.

Normalmente hay que pagar un depósito por la taza, que se recuperará al retornarla.

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(Foto de Toni Palau)