Unos simples huevos hechos en otro país puede convertirse en un plato nuevo para nosotros y apto para nuestro disfrute. La forma que tienen en Austria de hacer los huevos a la manera tradicional, es ciertamente peculiar pero el resultado es muy vistoso y lo más importante, es un plato con mucho sabor y un sabor agradable además.

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Para probar este plato en casa, necesitarás unos huevos, 100 gramos de caldo de carne, 150 gramos de queso para rallar, cebolla y un par de cucharadas de manteca o mantequilla. Ponemos una sartén en el fuego y le añadimos la cebolla en aros. Con un poco de manteca conseguiremos que se dore en pocos minutos. Cuando esto suceda, deberemos añadir el caldo.

En un bol aparte batimos los huevos y lo mezclamos con el queso. También añadimos la cebolla hecha con el caldo ya reducido. Añadimos sal. Ese bol lo introduciremos en el horno hasta que veamos que los huevos están a nuestro gusto. Es una delicia de plato, muy típico de Austria, que lo podrás encontrar en tu viaje.